Generalmente se presta cuidado a la piel visible como cara, manos, piernas, pies ¿y tu zona íntima? Sabías que la piel de la zona íntima es diferente a la piel del resto del cuerpo?

Existen factores internos que se encuentra en contacto con esta zona como son el flujo vaginal, la menstruación, el sudor y orina así como factores externos como el jabón de baño, la ropa interior, el uso de toallas y pantiprotectores que pueden lesionar la piel.

Es fundamental que toda la zona genital se encuentre limpia para evitar el mal olor, dolor y la aparición de infecciones.

* La vagina está protegida por un conjunto de microorganismos, cuya función es mantener el nivel de acidez (ph) adecuado y evitar la colonización de gérmenes patógenos los cuales provocan un aumento del pH y una disminución de esta flora, así como el flujo vaginal es normal y su función es proteger la vulva y la piel, sin embargo, este puede verse alterada por diversas causas como son el uso de preservativo, las variaciones hormonales de tu ciclo, la toma de antibióticos y anticonceptivos, una higiene íntima excesiva o deficiente, una manipulación inadecuada de la zona que conlleve la migración de bacterias desde el ano hacia la vulva, las relaciones sexuales…

¿Porque no se habla de la piel de la zona íntima, por pena o falta de conocimiento…?

1. Lo ideal es baño diario, hablamos de aseo externo (vulva, labios y clítoris) únicamente, porque el interior de la vagina se autolimpia. Pueden lavarse hasta dos veces en caso de calor y de sudor excesivo, lo mismo durante la regla pero no más. Enjuaga con abundante agua.

2. No utilizar esponja para la limpieza se debe realizar con los dedos y pasarlos con suavidad por los pliegues de los labios y alrededor del clítoris

3. Utilizar productos específicos indicados exclusivamente para la higiene intima

4. Evitar el uso de desodorantes íntimos, duchas vaginales y prendas íntimas excesivamente ajustadas

5. Es importante que la ropa interior se cambie a diario y se lave con productos poco agresivos y se enjuague correctamente. Emplear tejidos de algodón 100%

6. Cambiar con regularidad compresas y/o tampones, incluso aunque la cantidad de flujo no sea muy abundante.

7. No lleves el traje de baño mojado demasiado tiempo

8. Cuidado con la depilación

9. Visitanos si detectas un olor extraño, dolor, comezón, ardor o un color anormal en el flujo.